El término happy slapping o bofetada feliz, en español, nació en Reino Unido en 2005 y se trata de la grabación de una agresión física, verbal o sexual para después subirla a las redes sociales, páginas de internet, blogs o chats, explicó el comisionado del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE), Hertino Avilés Albavera.
Enfatizó que esta actividad puede darse en la búsqueda de ganar popularidad y “likes”, lo que lleva a muchos jóvenes a cometerla.
Y lo hacen muy frecuentemente niños, niñas, adolescentes, jóvenes, incluso, personas de edad adulta con el ánimo de que publicándolo en sus redes puedan llegar a tener más popularidad o puedan tener mucho más fama dentro del contexto online, incitando a que se les dé me gusta, likes y de esta manera publicitar esta acción de carácter violenta
Hertino Avilés Albavera / Comisionado IMIPE
El comisionado del IMIPE subrayó que en el 61 por ciento de los agresores que llevan a cabo el happy slapping son amigos o compañeros.
Se ha documentado que en la práctica de este fenómeno de carácter social, de carácter cibernáutico interfieren varios factores, si puede llegar a ser, en ocasiones imprevisto, repentino, pero también muy frecuentemente se prepara el ambiente y se prepara el contexto, una persona que quiere llevar a cabo un acto de esta naturaleza que puede tener un acuerdo con la víctima, incluso, puede haber un acuerdo entre los dos o simplemente otra persona se dedica estar atento, atenta para llevar a cabo la grabación a través de los medios electrónicos
Hertino Avilés Albavera / Comisionado IMIPE
El happy slapping puede llegar a tener consecuencias negativas para quien lo sufre, sobre todo, cuando se viraliza en las redes sociales, por lo que es importante prevenir este tipo de actividad.