Una tormenta geomagnética que se llevó a cabo en las últimas horas provocó el efecto de la llamada Aurora Boreal en muchas partes del mundo. Las luces de colores en el cielo, se convirtieron en un verdadero espectáculo en casi todo el planeta, incluso en México.
La noche del jueves 10 de octubre de 2024 se vivió un evento astronómico sin precedentes, una tormenta geomagnética severa G4, de gran magnitud, permitió la observación de auroras boreales en distintos puntos.
Este fenómeno, de una duración mayor a 20 horas, no solo sorprendió a la comunidad científica, sino que capturó la atención de habitantes y fotógrafos.
La tormenta geomagnética, clasificada como G4 en la escala de intensidad, fue desencadenada por una Eyección de Masa Coronal (EMC), una gigantesca liberación de plasma y energía solar que viajó a una velocidad de cuatro millones de kilómetros por hora desde el Sol hacia la Tierra.
Estos eventos son capaces de interactuar con el campo magnético terrestre, provocando la formación de auroras boreales que, en circunstancias normales, sólo son visibles en latitudes cercanas a los polos. Sin embargo, debido a la fuerza de esta tormenta, las auroras se hicieron visibles en latitudes medias y bajas, en nuestro país, estados como Zacatecas y Sonora pudieron ser testigos de la maravillosa postal.