La recolección de hongos silvestres comestibles es una tradición ancestral en Tetela de Volcán y otras comunidades ubicadas a las faldas del volcán Popocatépetl, la cual se repite cada año durante la temporada de lluvias, principalmente en caminatas por los bosques.
Miguel Arenas Arenas, director del proyecto ciudadano “Turismo y Cultura en Tetela del Volcán”, aseguró que en la zona se encuentran, entre otras, las variedades xolete, blanco, catrín, escobeta, orejas, escopetas de palo, totoralillo y panza, que tienen gran aporte nutricional.
“Siempre se han dedicado desde tiempos ancestrales a la recolección de hongos comestibles, por supuesto, por el simple hecho de estar a las faldas del volcán Popocatépetl, es muy peculiar que en sus montes, en este caso hablando de Tetela del Volcán, se dé una gran variedad de platillos, donde las personas se dedican a la recolección de ellos y posteriormente degustarlos, en una variedad muy amplia de platillos, que actualmente forman parte de nuestra gastronomía local y que nos dan identidad en toda esa parte de la región”.
Miguel Arenas Arenas, Director Proyecto Turismo y Cultural Tetela
Dijo que esta actividad no es exclusiva de Tetela del Volcán y comparte la tradición en Hueyapan, Santa Cruz, Estado de Puebla y Ecatzingo, Estado de México; por lo que muchas veces habitantes de estas comunidades coinciden durante la recolección en los bosques.
La temporada también es propicia para recolectar otros vegetales, algunos de los cuales forman parte de la alimentación de los pueblos desde la época prehispánica.
“También viene la parte ahorita de recolección, por ejemplo, de alaches de quelites, los alaches es un platillo que nos da identidad como tetelenses y los quintoniles, verdolagas, forman parte de nuestra gastronomía local y que principalmente en nuestras familias tetelenses, hablando exclusivamente de Tetela, muchas familias lo hacen, ya que lo pueden recolectar desde los patios, hasta en los solares y por supuesto en sus campos”.
Miguel Arenas Arenas, Director Proyecto Turismo y Cultural Tetela
Y convierten a los alimentos en platillos tradicionales: caldos, sopas y los hongos, particularmente, los acompañan con mole rojo o verde. Además, es un ingreso económico para las familias, al venderlos en tianguis y organizar caminatas de recolección con visitantes que llegan a la zona.
