Un sismo de magnitud preliminar 7.0, con epicentro frente a la costa al sur de Eureka, sorprendió este jueves a los habitantes de la costa norte de California. Este temblor, el más fuerte registrado en el estado en más de cinco años, generó alarma, aunque los daños iniciales reportados fueron menores.
El terremoto ocurrió en la falla de Mendocino, cerca del punto triple de Mendocino, una de las zonas de mayor actividad sísmica del estado, de acuerdo al Centro de Ciencias Sísmicas del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El movimiento se sintió a más de 320 kilómetros de distancia, alcanzando el área de la bahía de San Francisco y el valle de Sacramento. Sin embargo, las comunidades más cercanas al epicentro, como Ferndale y Petrolia, reportaron solo daños menores, como la caída de productos en estanterías y rupturas de botellas en tiendas locales.
En Eureka, a unos 80 kilómetros del epicentro, los alumnos de una escuela primaria fueron evacuados preventivamente. La subdirectora Sue Nickols comentó que, tras una inspección, el edificio no presentó daños y las clases continuaron. En el condado de Humboldt, más de 13 mil personas se quedaron sin electricidad.
El evento ocurre en un período que expertos consideran de mayor actividad sísmica en California, tras décadas de relativa calma.