La Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitió un sombrío pronóstico, advirtiendo que “muchas vidas están en peligro si el bloqueo de Israel en Gaza persiste”. La región palestina se encuentra en una crisis humanitaria a medida que la intensa campaña de bombardeos y el bloqueo de Israel provocan la agotación de suministros críticos, incluyendo alimentos, combustible, agua y medicinas.
A pesar de que en los últimos días se ha permitido la entrada de un número limitado de camiones, esto ha aliviado apenas parcialmente la situación, quedando muy lejos de satisfacer las necesidades de la población afectada.
La crisis humanitaria se intensifica a medida que un número creciente de personas se quedan sin hogar debido a los bombardeos y las evacuaciones forzadas. A pesar de que Israel afirma que sus operaciones no tienen como objetivo a la población civil, las agencias de la ONU afirman que más de un millón de personas han huido de la región y que el 40% de las viviendas han sido destruidas o gravemente dañadas.
Además, la situación sanitaria es extremadamente crítica, según alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS). Dos tercios de los hospitales y un tercio de las clínicas en Gaza se encuentran cerrados, lo que agrava aún más el sufrimiento de la población. Por lo tanto, la ONU hace un llamado urgente a un alto el fuego humanitario.
La ONU destaca que “el primer paso es un alto el fuego humanitario inmediato, que salvará vidas civiles al facilitar la entrega de ayuda humanitaria rápida y efectiva en toda Gaza, proporcionada de acuerdo con las necesidades y no limitada por criterios arbitrarios. Esta violencia no cesará a menos que los líderes tomen decisiones valientes y humanas, que son esenciales para la humanidad en su forma más básica”.