Este martes, el expresidente boliviano Evo Morales solicitó a los organismos regionales CELAC y ALBA para que investiguen el atentado a balazos que denunció haber sufrido el fin de semana, cerca de agentes del Estado, una versión que el gobierno actual cuestiona. Morales, líder indígena de izquierda, exigió una “investigación internacional e independiente” a través de la red social X.
En un video publicado el domingo, denunció que su vehículo fue atacado por un grupo militar y policial mientras se desplazaba por la región cocalera del Chapare, en Cochabamba. Según su relato, el automóvil recibió 14 impactos de bala, aunque él salió ileso; sin embargo, su chofer resultó herido por el roce de los proyectiles.
El exmandatario acusó al gobierno de su exministro Luis Arce de intentar asesinarlo. Este incidente ha generado un fuerte debate en el país sobre la seguridad y la situación política actual.