La fuerza aérea ucraniana denunció este jueves que Rusia lanzó un misil balístico intercontinental (ICBM) durante un ataque en la ciudad de Dnipro. Este sería el primer uso militar de un arma diseñada para ojivas nucleares en la guerra, marcando una peligrosa escalada en el conflicto tras los recientes ataques ucranianos con misiles occidentales en territorio ruso.
El misil fue lanzado desde Astrakhan, Rusia, hacia Dnipro, a más de 700 km, afectó infraestructura crítica y una empresa industrial, dejando dos heridos, se presume que el misil utilizado fue un RS-26 Rubezh, con capacidad para transportar ojivas nucleares, aunque no se confirmó que portara una en este caso.
Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, declaró que el uso del ICBM representa una nueva amenaza en la guerra. Expertos internacionales califican el hecho como una escalada sin precedentes en el uso de armas estratégicas.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el Departamento de Defensa de EE. UU. aún no emiten declaraciones oficiales.
Moscú advirtió previamente que consideraría estos ataques como una escalada importante.