El gobierno ucraniano informó la detención de un ciudadano ucraniano que trabajaba como voluntario para el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, acusado de espiar a las fuerzas ucranianas para el servicio de inteligencia ruso (FSB) en Pokrovsk.
De acuerdo al Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), el detenido utilizaba su voluntariado como pretexto para “identificar posiciones de las fuerzas ucranianas y su artillería”, facilitando ataques rusos con drones y bombas guiadas.
Durante el arresto, las autoridades requisaron el celular del sospechoso, donde encontraron conversaciones anónimas con un oficial del FSB. El acusado, de 34 años, enfrenta una posible cadena perpetua y la confiscación de sus bienes si se confirma la traición.
