El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, de 79 años, fue sometido a una cirugía de emergencia en São Paulo la noche del lunes debido a una hemorragia intracraneal. De acuerdo el Hospital Sirio-libanés, la operación transcurrió sin complicaciones, y actualmente el mandatario se encuentra estable y bajo observación en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Lula fue trasladado al hospital después de que una resonancia magnética realizada en Brasilia revelara la hemorragia cerebral, atribuida a una caída sufrida el pasado 19 de octubre. En aquel incidente, el presidente se golpeó la cabeza en el baño de su residencia, lo que le ocasionó una herida en la nuca que requirió puntos de sutura.
Tras el accidente, los médicos recomendaron a Lula limitar sus actividades. Esto lo llevó a cancelar su participación presencial en la cumbre de los BRICS en Rusia, así como en la COP29 sobre cambio climático en Bakú, Azerbaiyán. Sin embargo, el presidente mantuvo un ritmo intenso de trabajo, despachando desde la residencia oficial y cumpliendo con compromisos clave como la cumbre del G20 en noviembre y la reciente cumbre del Mercosur en Montevideo.