México ha intensificado sus esfuerzos para proteger las zonas naturales por donde migra e hiberna la mariposa monarca, con acciones clave como el incremento de áreas protegidas, la reducción de la tala clandestina y la reforestación, garantizando su preservación y evitando su desaparición. La Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca ha crecido a 56 mil 259 hectáreas, con una zona núcleo de 13 mil 554 hectáreas que alberga los seis principales santuarios de hibernación en Michoacán y el Estado de México.
Desde 2005, la reforestación ha sido clave, con más de 20 mil 600 hectáreas reforestadas y 21.6 millones de árboles plantados para garantizar su hábitat. El cambio climático, el uso de herbicidas en áreas de reproducción en EE.UU. y la degradación de los bosques en México siguen siendo riesgos para la mariposa monarca.
En colaboración con ejidatarios y la población local, la tala clandestina ha disminuido, con vigilancia diaria en zonas clave como el ejido El Rosario en Michoacán. Este año, la migración de las mariposas monarca se ha retrasado por factores climáticos y el uso de insecticidas. Aun así, se espera su arribo completo para estimar su población entre octubre y marzo.