Desde hace tres décadas, en el local 264 del mercado municipal “Cuautla”, el restaurador de “Niños Dios” César Naranjo González, aporta a la celebración de la Candelaria con su oficio, la que recuerda el episodio bíblico de la presentación de Jesús en el templo, 40 días después de su nacimiento.
A partir de ese pasaje, surgió la tradición de las candelas, en que fieles católicos llevan sus representaciones del niño Jesús a la iglesia, que son retocados y vestidos por artesanos como César, quien recuerda que en los mejores años llegó a restaurar hasta 800 “Niños Dios” en esta temporada, hasta verse como nuevos.
Esta actividad la inició guiado por un experto reparador: Juan Ramales y a su vez ha enseñado el oficio a sus dos hijos y otros familiares.
“Es un oficio muy bonito, es hermoso trabajar estas piezas, porque el cliente se va satisfecho, puede ser que haya una excepción, pero casi al 100% mis clientes se van satisfechos y es un oficio que ha pasado a través de la generación porque actualmente quien trabaja muy bien, hace sus restauraciones muy bien realizadas es uno de mis hijos que se llama Luis”.
César Naranjo González / Restaurador “Niños Dios”
A partir del año pasado, se ha mostrado una recuperación en la demanda de este oficio, después de que en 2021 y 2022, los ingresos fueron mínimos, casi inexistentes, debido a la restricción de movilidad por la pandemia de covid-19.